El golpe de Estado en Honduras, es un golpe contra todo lo que encarna la ALBA, por lo que la Alianza Bolivariana no sólo es una urgencia histórica sino la vía inexorable para hacerle frente a la crisis estructural del capitalismo

Comandante en Jefe Hugo Chavez Frias
05 de Julio de 2009

sábado, 27 de diciembre de 2008

Sistemas Pechora-2M para la Fuerza Armada de Venezuela

En una noticia publicada el dia 26 de diciembre de 2008, en el site del diario RIA Novosti, se informa sobre la posibilidad de adquisición de sistemas anti-aereos de mediano alcance de origen ruso, por parte de Venezuela.



Estos sistemas modernizados, fueron visto por primera vez en el año 2006, en la parada militar del Dia de las fuerzas armadas egipcias en El Cairo.


Sistema antiaéreo Pechora-2M: Un arma eficaz como el Kalashnikov.
Vedomosti 22:24 | 26/ 12/ 2008


Rusia ingresará casi 250 millones de dólares gracias a la exportación de sistemas de defensa antiaérea S-125 Pechora-2M, escribe hoy el diario Vedomosti.

El Pechora-2M es una versión modernizada del sistema S-124 que se remonta a los años 60. Ahora es un sistema móvil, gracias a lo cual permite repeler un primer ataque de la aviación enemiga. "Es un arma sencilla pero eficaz, como el fusil Kalashnikov", constató el ejecutivo de una empresa que produce componentes para el Pechora.

En los próximos tres años, Rusia venderá 200 sistemas de este modelo a Egipto, Libia, Myanmar, Siria, Turkmenistán, Venezuela y Vietnam. Egipto recibirá casi 70 ejemplares.

El experto militar Igor Korotchenko augura que los sistemas rusos de defensa antiaérea, empezando con las armas desarrolladas en la década del 60 y terminando con el flamante modelo S-400, seguirán teniendo demanda en el futuro próximo a pesar de la crisis económica. Bien manejados, incluso los antiguos sistemas antiaéreos producidos en la URSS son capaces de derribar aviones modernos: así, un proyectil lanzado por S-125 abatió en 1999 el bombardero invisible F-117 sobre el territorio de la ex Yugoslavia.


Fuente:

http://sp.rian.ru/onlinenews/20081226/119185315.html


viernes, 26 de diciembre de 2008

Confirmada la adquisición de los helicopteros de ataque Mi-28NEh NightHunter


En efecto, ya finalizando el año se ha confirmado, a traves de la prensa rusa, la adquisición de los helicopteros de ataque Mi-28NEh NightHunter, por parte de la Fuerza Armada.



Rusia recibió 12 pedidos para suministro de helicópteros Mi-28N
16:46 | 26/ 12/ 2008


Moscú, 26 de diciembre, RIA Novosti. Rusia ha recibido y está dispuesta a cumplir 12 pedidos para el suministro de helicópteros de combate Mi-28N a países extranjeros incluida Venezuela, declaró hoy el director general de la empresa Helicópteros de Rusia, Andrei Shibítov.

"Tenemos 12 pedidos, incluidos los de Venezuela, y estamos preparados a cumplir cualquier pedido", apuntó Shibítov.

"Por ejemplo, el Gobierno turco está interesado en comprar esos helicópteros rusos", agregó.

Fuente:

http://sp.rian.ru/onlinenews/20081226/119186252.html


Algunas noticias relacionadas a la Aviación Militar

Un resumen de algunas noticias relacionadas a nuestra AviaciónMilitar, que se generaron en el ultimo trimestre del año por culminar.









Son las noticias que confirman varias de las noticias más resaltantes acerca de la Aviación Militar generadas este año. Se confirma la llegada de los nuevos entrenadores de fabricación china, K-8 Karakorum (dependiendo del equipamiento, podrian ser del modelo K-11, que es la versión 100% con componentes chinos); la integración total de los radares chinos JYL-1 a nuestra red de vigilancia aerea; las maniobras aereas con la Federación Rusa el proximo año; y la gran noticia de este año que termina: el lanzamiento del primer satelite venezolano (el satelite "Simón Bolívar" de fabricación china tambien). La ultima noticia aun esta por confirmar, aparecio en un canal ruso y es acerca de la adquisición de los sistemas anti-aereos de corto alcance Tor.



viernes, 5 de diciembre de 2008

Venezuela adquiere MANPADS Igla-S rusos

Venezuela adquirió a la Federación Rusa, un lote indeterminado de sistemas portatiles rusos: Igla-S, considerados los mejores en su tipo en el mundo.

MANPADS Igla-S



VSHORAD Dzhighit

Estos misiles son producidos por la empresa rusa KBM (Konstruktorskoye Byuro Mashynostroyenia), y existen otras adapciones del sistema como por ejemplo: adaptaciones navales (Igla-N), versión anti-helicoptero aire-aire (Igla-V) y sistema motorizado (Strelets).

En Latinoamerica son utilizados en diversas variantes y generaciones por: Cuba, Peru, Nicaragua, Ecuador, Brazil y Mejico; esta ultima nación lo ha incorporado a un novedoso sistema de seguridad de sus plataformas petroleras.

La Noticia ampliada:


Venezuela compra en Rusia sistemas portátiles de defensa antiaérea.

Vedomosti

22:23 | 19/ 11/ 2008


El grupo Rosoboronexport, monopolio público que controla la venta de armas rusas en el mercado internacional, firmó un importante acuerdo para la exportación de sistemas portátiles de defensa antiaérea Igla-S. Uno de los compradores es Venezuela, escribe hoy el diario ruso Vedomosti.

El asunto trascendió a la luz pública a través de Lomo, empresa rusa de equipos ópticos que anunció la suscripción de un convenio por valor de 72 millones de euros con otra entidad local del sector de defensa, KBM. En 2009-2011, Lomo deberá suministrarle a esta compañía los componentes para la ejecución de un contrato de exportación de armas. Un portavoz de Lomo rehusó mencionar el importe total del contrato y el nombre del comprador. Representantes de KBM no estaban disponibles para comentarios al cierre de esta edición.

Una fuente del sector precisó que el contrato prevé la entrega a Venezuela de varios centenares de misiles portátiles antiaéreos Igla-S, por valor de decenas de millones de dólares. Otro ejecutivo de la industria rusa de defensa dijo que la suma de 72 millones de euros incluye también el suministro de componentes para sistemas autopropulsados antitanque Jrizantema, producidos por KMB para Siria y Libia. En cuanto a los misiles Igla-S, serán exportados supuestamente a Vietnam y algunos países más.

Lomo produce ojivas autoguiadas que representan como máximo un 30% en el precio de un misil pero KBM tiene previsto exportar también otros artículos, recordó esta fuente. De ahí, la conclusión de que KBM se aseguró para 2009-2011 contratos por valor total de US$300 millones.

El portavoz de Rosoboronexport, Viacheslav Davidenko, se abstuvo de comentar la noticia. El embajador venezolano en Moscú, Hugo José García Hernández, dijo a través de un auxiliar que no está preparado para responder a la pregunta sobre los misiles Igla.

Ruslán Pújov, experto ruso en temas militares, opina que la venta de sistemas portátiles de defensa antiaérea a Venezuela es, a los ojos de Washington, el más importante y el más sensible de los contratos que tiene KBM. No caben dudas de que EEUU hará un gran esfuerzo por abortar esta transacción.

EEUU, recordó el experto, acusa al presidente venezolano, Hugo Chávez, de ayudar a la guerrilla de las FARC en Colombia. Incluso usó a provocadores en calidad de clientes ficticios para detener en Tailandia al empresario ruso Víctor Bout, supuestamente interesado en la venta de misiles antiaéreos a las FARC.

El futuro de la transacción con Venezuela, a juicio de Pújov, va a demostrar el grado de autonomía que Moscú haya escogido en las relaciones con Washington.


Fuente:

http://sp.rian.ru/onlinenews/20081119/118401447.html


miércoles, 3 de diciembre de 2008

China traspasará control del Satélite Simón Bolívar a Venezuela en los próximos días

Noticia relacionada a nuestro Satelite Simón Bolívar:



China traspasará control del
Satélite Simón Bolívar
a Venezuela en los próximos días



Por: Agencia Bolivariana de Noticias (ABN)
Fecha de publicación: 03/12/08

Caracas, 02 Dic. ABN (Ramses Fuentes).- En los próximos días el Gobierno de la República Popular China traspasará el control total del satélite Simón Bolívar al Gobierno venezolano.

Así lo informó este martes la titular del Ministerio del Poder Popular para la Ciencia y la Tecnología (MCT), Nuris Orihuela, durante su comparecencia ante la plenaria de la Asamblea Nacional (AN) para aportar información sobre el satélite Simón Bolívar, puesto en órbita recientemente.

Del mismo modo, la titular de la cartera científica desmintió diversos rumores que indicaban que el satélite estaba fuera de funcionamiento.

La ministra comentó que esta semana concluyó la revisión de servicios del satélite, lo que significa que la verificación de la carga útil del Simón Bolívar es positiva.

“No importa cuánto se empeñen en desacreditar, les digo que estamos en condiciones óptimas”, sentenció.

Nuris Orihuela también acentuó que el costo económico del satélite es ínfimo en relación con todos los beneficios y oportunidades que facilitará, ya que sus servicios de telemedicina y teleeducación, entre otros, representan un gran cambio en la vida de los venezolanos.

“Si nosotros salvamos una vida con el Simón Bolívar, si incorporamos un niño al sistema educativo que está excluido, porque está en un área completamente desasistida y alejada, ese día se está pagando el Simón Bolívar”, consideró.

Por esa razón, continuó la ministra, es que a este satélite se le califica de socialista, porque no está destinado a enriquecer a un sector, sino a mejorar la calidad de vida de los venezolanos.


Fuente:

http://www.aporrea.org/actualidad/n124997.html



martes, 2 de diciembre de 2008

Finalizan Maniobras Navales VenRus-2008

Últimas noticias
Armada rusa califica de éxito fase activa de ejercicios navales ruso-venezolanos
12:59 | 02/ 12/ 2008



Moscú, 2 de diciembre, RIA Novosti.
La Armada rusa calificó hoy como "un éxito" la fase activa de la Operación Combinada Venrus 2008, ejercicios navales ruso-venezolanos en el Caribe.

"La fase activa de los ejercicios se desarrolló en consonancia con el plan acordado al detalle durante la visita de buques rusos al puerto venezolano de La Guaira", declaró este martes el capitán de navío Igor Digalo, portavoz de la Armada rusa.

Buques rusos y venezolanos, precisó, "ensayaron el despliegue de las fuerzas en la zona sur del Caribe, las maniobras tácticas conjuntas en filas y varios ejercicios, en particular, los de defensa antiaérea; búsqueda, detección, persecución, detención e inspección de un buque infractor; reabastecimiento, recepción y entrega de carga sobre la marcha".

También participaron en esta operación los helicópteros emplazados a bordo de la escuadra rusa y los aviones de la Fuerza Aérea de Venezuela.

Las tripulaciones, subrayó, demostraron "un alto nivel profesional", "ensayaron todos los elementos y cumplieron de forma cabal la misión encomendada por los superiores".

Las maniobras, en las que participaron un total de 1.150 efectivos militares rusos y 700 venezolanos, son las primeras que se llevaron a cabo en el Caribe con la asistencia de Rusia después de que se desintegró la URSS en diciembre de 1991.

La escuadra rusa estaba integrada por el buque insignia de la Flota del Norte, el crucero nuclear lanzamisiles "Pedro el Grande", el gran buque antisubmarino "Almirante Chabanenko" y dos buques de apoyo. Venezuela delegó unidades aeronaves y 12 buques, incluidas tres fragatas.


Fuente:

http://sp.rian.ru/onlinenews/20081202/118641453.html

Las mejores fotos de las Maniobras Navales VenRus-2008 (PARTE 3)

Continuamos con la selección de fotos...







Las mejores fotos de las Maniobras Navales VenRus-2008 (PARTE 2)

Continuamos con la selección de fotos...








domingo, 30 de noviembre de 2008

2 buques más para la Armada

En el site oficial de nuestra Armada se puede leer la siguiente noticia:



Dos buques más para la
Armada Nacional Bolivariana



Para el primer trimestre de 2009 está prevista la botadura del segundo buque de vigilancia litoral de los tres que se construyen en España para la Armada Nacional Bolivariana, puesto que el cuarto de este tipo se prevé armarlo en Venezuela en los astilleros de Dianca, en Puerto Cabello (Carabobo).A pocos días de la botadura al agua en el astillero Navantia del primero de los buques que lleva por nombre ANB Guaicamacuto, siglas GC-21, ya se colocó en quilla el primero de los trece bloques del tercer patrullero de vigilancia litoral de la serie, proceso que implica el inicio de su construcción en grada, es decir fuera del agua, en vías de su botadura que se efectuará en el mes de abril del año próximo. Autoridades de la Contraloría de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana, de la Dirección de Contratos de la Armada y de la misión Naval Venezolana en España, con su jefe el VA Gerson Padrón García al mando, certificaron la realización de la puesta en quilla de este tercer buque que llevará el nombre del cacique Naiguatá y las siglas GC-23. El hito de inicio de arquitectura de este buque se realizó meses antes con el corte de la primera plancha de acero, proceso que corresponde al primer evento de la estrategia constructiva en bloques que realiza el astillero español.


http://www.armada.mil.ve/index.php?option=com_content&task=view&id=477&Itemid=197







sábado, 29 de noviembre de 2008

Botado primer buque BVL para la Armada

El pasado 16 de octubre fue botado el primero de los cuatro buques del tipo BVL, que la empresa española Navantia esta construyendo para Venezuela el: ARBV GC-21 "Guaicamacuto".



Fotos tomadas del site oficial de la Armada venezolana.


La noticia ampliada:



Botadura del primer Buque de Vigilancia Litoral para Venezuela en Navantia San Fernando



(16/10/2008) Por F.J. Álvarez Laita (Infodefensa.com) - El primer Buque de Vigilancia del Litoral (BVL) de los cuatro de este tipo que ha contratado la Armada de Venezuela a los astilleros españoles Navantia fue botado el jueves, 16 de octubre, en San Fernando (Cádiz). Se espera que el buque pueda partir hacia aguas venezolanas en septiembre de 2009, aproximadamente un mes después de su entrega a la Marina venezolana.

El buque botado es un patrullero de altura especialmente diseñado para la protección y vigilancia del litoral, protección del tráfico marítimo, asistencia a otros buques, lucha contra incendios, lucha contra la contaminación marina, transporte, misiones de búsqueda y salvamento, etc.

La madrina del buque fue Mari Carmen La Riva de Quintana, esposa del Comandante General de la Armada Venezolana, que lo bautizó con el nombre de ANBV Guaicamacuto. La representación oficial del país americano estuvo presidida por el almirante Pedro González Díaz, Jefe del Estado Mayor General de la Armada Nacional Bolivariana, y en ella se integraron ente otras autoridades el embajador de Venezuela en España, Alfredo Toro Hardy, y el vicealmirante Arístides Yibirin Peluffo, Comandante General de Logística.

Entre el numeroso personal naval y militar venezolano asistente, se encontraban los componentes de la Misión Naval Venezolana en España, con su jefe, el vicealmirante Gersón Padrón García, a su frente.

Igualmente, entre las autoridades españolas presentes en el acto se encontraba el Almirante de Apoyo Logístico en la Bahía de Cádiz, vicealmirante Juan Francisco Serón, y por parte de Navantia asistió el presidente de la compañía, Pedro Gómez Jaén.

Puntualmente, a las 17,15, para aprovechar el punto más alto de la marea, tras la bendición y estrellarse la botella de vino contra la proa, mientras sonaba la sirena de aviso, el buque comenzó su corto recorrido hacia el mar.

La estrechez del caño de Santi Petri, donde está situado el astillero, y el poco fondo existente en la orilla contraria condicionó la parte técnica de la botadura. Se contó con dos potentes remolcadores los VB Rota y VB Jeréz que, presionando con sus proas los costados del patrullero, pararon su carrera inmediatamente después de salir de la grada. Como elemento de seguridad en las amuras se habían enganchado, con protecciones para no dañar el casco, sendas cadenas de gran tamaño para actuar de freno y retenida. Tras la botadura el patrullero fue remolcado a un muelle de armamento de la factoría.

Hay que resaltar que el buque, contra lo que es habitual, se botó con los ejes y hélices ya montados. Este hecho es indicativo del nivel de avance con que Navantia, mediante las técnicas de construcción de bloques prefabricados, pone en el agua los buques que construye.

En la grada número tres, junto al buque que se botó, podían verse los primeros bloques ya montados del segundo patrullero de la serie, apreciándose en distintos puntos de los alrededores otros módulos en elaboración.

Corte de chapa

El primer corte de chapa para este buque se realizó el 15 de diciembre de 2006, colocándose el primer bloque en la grada el 27 de noviembre de 2007.

Este buque es el primer resultado de la colaboración establecida entre la Armada Nacional Bolivariana y Navantia que contempla la construcción además de los cuatro patrulleros de altura BVL, de otras cuatro corbetas, denominadas con el apelativo genérico de Patrullero Oceánico de Vigilancia (POV).

El plan de construcción tiene planificado que los tres primeros BVL se construyan en la factoría de Navantia en San Fernando y que el cuarto pueda construirse en un astillero venezolano. Los POV se botarán en la cercana factoría de Navantia en Puerto Real, habiéndose comenzado ya la colocación de bloques del primero.

Según pudo saber Infodefensa.com, los nombres y numerales asignados a los cuatro BVL son: ANBV Guaicamacuto (GC-21); ANBV Yavire (GC-22); ANBV Naiguata (GC-23) y ANBV Tamanaco (GC-24).Las siglas ANBV se corresponden con la Armada Nacional Bolivariana de Venezuela y han sustituido a las de ARBV (Armada de la República Bolivariana de Venezuela) utilizadas hasta hace poco tiempo. Curiosamente en el momento de la botadura el Guaicamacuto tenía resaltados en color dorado el nombre y las letras ANB, permaneciendo en gris la V final.

Respecto a los POV se sabe que el nombre y el numeral asignado al primero es ANBV Guaicaipuro (F-31), no pudiéndose aportar por el momento ningún datos sobre la denominación de las otras tres corbetas. Todos los nombres corresponden a caciques de los indios caribes con el común denominador de haberse distinguido en la lucha contra los conquistadores españoles

Características del ANBV Guaicamacuto

Con una eslora total de 79,9 metros (71,00 m entre perpendiculares), el buque botado tiene una manga máxima de 11,50 y de 11,10 m en la flotación. Con un puntal de 7,00 m (cubierta principal) y calado de 3,70 m, desplaza 1.453 toneladas (1.720 t a plena carga).

De casco y superestructura en acero, su propulsión es de dos diesel motores de 5.920 BKW cada uno, dos reductoras, dos ejes y otras tantas hélices de paso variable. La velocidad máxima será superior a 22 nudos y económica de 16 nudos, con una autonomía de autonomía de 4.000 millas a 16 nudos.

Con una dotación de 34 personas, más capacidad para transportar otras 30, su armamento incluye un cañón Oto Melara de 76 mm en proa, un montaje doble con dos cañones de 20/25 mm, en popa y dos ametralladoras de 12,7 mm en los alerones del puente, así como dos direcciones de tiro, una radar y otra optrónica. Entre los sensores dispone de ESM radar y comunicaciones (COMINT); radar de vigilancia aérea/superficie (2D); IFF y Link Y. El BVL cuenta con cubierta de vuela par un helicóptero tipo AB212, AB412 o AS565, así como con rampa en popa para una embarcación tipo RHIB. Dispone también de equipos de lucha contra los vertidos (dispersantes, tangones bombas, barreras, flotantes, etc) y sistema para lucha contraincendios.



http://infodefensa.com/lamerica/noticias/noticias.asp?cod=749



viernes, 28 de noviembre de 2008

Astillero Vulcano construirá 5 buques para la Armada

El astillero Vulcano de Vigo construirá para Venezuela cinco buques científicos para buscar petróleo


El contrato garantiza dos años de trabajo para la factoría


Europa Press - Vigo - 05-08-2008

Tras el acuerdo con Repsol y la negociación con el Santander para la reversión al estado del Banco de Venezuela, una nueva operación industrial ha venido a confirmar el nuevo tiempo de las relaciones del país presidido por Hugo Chávez y España. Las autoridades venezolanas han encargado al astillero gallego Factorías Vulcano la construcción de cinco buques científicos, destinados a buscar petróleo, a realizar investigaciones oceanográficas y a levantar cartografía para Petróleos de Venezuela (PDVSA).

El importe total de la operación no fue revelado, pero asegura al menos dos años de trabajo para los trabajadores del astillero, desde el que afirman que están totalmente abiertos a la colaboración con Venezuela, facilitandole todas las informaciones que haga falta por el bien del proyecto.

PDVSA utilizaba para la exploración y la cartografía buques alquilados a empresas noruegas, que costaban alrededor de 13.000 euros la hora, un gasto muy importante. Por ello, desde el Gobierno venezolano decidieron que les saldría mejor comprar sus propios, buques, que 'se pagarán por si sólos con trabajo', como afirmó el contraalmirante Juan Carlos Torres, director de la Logística del Estado Mayor Naval de la Armada Venezolana. Además, afirmó que los costes están por debajo de los que tiene un buque construido en cualquier país con menos experiencia.

Los astilleros Factoría Vulcano, que tienen su sede en Vigo, serán los encargados de realizar el pedido venezolano. El proyecto, que lleva desarrollandose más de tres años, incluirá un buque preparado para navegar por el Antártico, con casco reforzado y capacidad para embarcar helicópteros. Este proyecto será sufragado directamente por el PDVSA, con sus fondos y con lo que ahorrarán de tener que alquilar otros buques.

El director comercial de los astilleros, y director del proyecto, José Luís Méndez Pérez, explicó que la construcción se concluirá en un tiempo de dos años, tiempo que podría verse alterado por la entrega de los motores por parte de los proveedores, 'que podrán ser alemanes o noruegos'.

Méndez Pérez aseguró que los buques que construirán son 'puramente científicos', concretando algunos de los usos que puede realizar: 'para investigación oceanográfica y sísmica, para detectar bolsas de petróleo en fondos submarinos, levantar cartografía y todo lo referente al estudio del mar', afirmó.

Vulcano, que construye también buques para Noruega, Filipinas y el Gobierno español, colaborará con la Armada Venezolana, facilitandole toda la información necesaria a la comisión que se designe para la construcción de los trabajos. 'Estamos totalmente abiertos a la transferencia tecnológica con la Armada de Venezuela', afirmó el director comercial de los astilleros.


http://www.atlantico.net/noticia/58656/Venezuela/Chavez/astilleros/Vulcano/Vigo/astillero



jueves, 27 de noviembre de 2008

5 buques cientificos que refuerzan la flota de la Armada

Nuestra Armada, en combinación con PDVSA, han adquirido cinco buques cientificos distribuidos de la siguiente manera: dos (02) buques de propecciones submarinas e investigación sismologicas; dos (02) buques de investigaciones oceanograficas; y un (01) rompehielos de investigaciones antarticas.

Dado lo reciente de la introducción del buque hidrografico ARBV BO-11 "Punta Brava", no esta previsto que ninguno de estos buques venga a reemplazarlo, o lo que es lo mismo: la flota de buques cientificos de nuestra Armada, se incrementara sensiblemente, si bien estos cinco buques seran operados y mantenidos logisticamente por una suerte de equipo mixto entre PDVSA y la ARBV.

Estos buques debrian estar construidos en unos dos años.


Creemos que algunos de los buques adquiridos a esta empresa
guarde algun parecido a este buque de apoyo de plataformas
petroliferas offshore, construido por este astilleros gallegos



Los Astilleros Vulcano arrastra una tradición que comienza a principios de los años 30 del pasado siglo estaba especializada en la construcción de calderas para locomotoras, en 1940 iniciaron sus primeros trabajos en el sector naval. En principio se dedicaron a trabajos de reparación de los motores a vapor que aún estaban operativos en aquellas fechas. A comienzos de los años 90 ya realizaban construcciones para armadores rusos: en 1991 salieron de sus instalaciones las primeras unidades de los ocho buques pesqueros arrastreros encargados desde el país del Este europeo. En 1993 se convirtió en el primer astillero privado en conseguir la certificación de calidad ISO 9001, emitido por una compañía noruega de verificación de la calidad empresarial.

Actualmente estos astilleros (cuyo nombre correcto es Factorias Vulcano S.A.), han fabricado varios de los lanchones de desembarco de la Armada espñaola del modelo LCM-1E, y han construido buques de diversos tipos para usuarios civiles, incluidos algunos catalogado como Rompehielos tipo ICE3; de ahi, que el buque antartico que nuestra Armada adquiere, viene precedido por una serie de construcciones navales exitosas por parte de esta empresa.



martes, 30 de septiembre de 2008

Entrevista al comandante de la Reserva y Movilización Nacional

La Agencia Bolivariana de Noticia le realizó una interesante entrevista al comandante de la Reserva y Movilización Nacional, mayor general Freites Reyes.


La Milicia no busca militarizar a la sociedad, sociabiliza nuestra Fuerza Armada


ABN 29/09/2008


Foto: Americo Morillo, ABN.

Caracas, 28 Sep. ABN (Yesenia Chacón).- Diversas opiniones, unas con fundamentos y otras sin ellos, han surgido a partir de la creación de la Milicia Nacional Bolivariana (MBN), antiguo cuerpo de la Reserva Nacional y Movilización Nacional, cuya concepción y funciones se asientan en la nueva Ley Orgánica de la Fuerza Armada Nacional Bolivariana (Lofanb), específicamente entre los artículos 43 y 51.

El comandante general de la MNB, mayor general Carlos Freites Reyes, conversó con la Agencia Bolivariana de Noticias (ABN) acerca del debate que ha generado esta nueva ley, decretada el pasado 31 de julio por el presidente de la República, Hugo Chávez Frías, mediante el poder que le confirió la Asamblea Nacional (AN) para crear leyes vía habilitante, según lo consagra el artículo 236 de la Constitución.

Freites Reyes se concentró es desmitificar todas las matrices de opinión nacidas en torno a la MNB, su misión, el por qué del cambio de nombre, sus fundamentos constitucionales, las referencias foráneas, y lo más importante, la preocupación de muchas personas que, habiendo leído o no esta Ley, temen lo que muchos medios de comunicación han vaticinado como “la militarización de la sociedad”, término ante el cual el entrevistado fue muy enfático: “No queremos militarizar la sociedad, como dicen por ahí (…), más bien buscamos, como yo suelo decirlo, la socialización de nuestra Fuerza Armada”.

ABN: ¿Cuál es la diferencia fundamental entre el cuerpo de Reserva Nacional y Movilización Nacional y la Milicia Nacional Bolivariana? ¿Por qué ese cambio de nombre?

CFR: Tu lo has dicho, es apenas un cambio de nombre, pero es un cambio que responde a la necesidad de garantizar los derechos humanos de los reservistas en caso de un conflicto bélico, Dios no lo quiera.

Recuerda que el artículo 23 de nuestra Constitución dice que los tratados relativos a los derechos humanos firmados por Venezuela tienen jerarquía constitucional. Pues bien, la denominación de “miliciano” se encuentra concebida en los convenios de Ginebra (1949), no el de “reservista”, de esta manera se busca reconocer el status cívico militar del pueblo en protección a sus derechos, contenidos en los tratados del Derecho Internacional Humanitario

Es decir, un “miliciano” es considerado en el marco del Derecho Internacional Humanitario como un combatiente y no como un terrorista o un asesino. Si muere, su familia queda protegida por el Estado, por ejemplo.

ABN: ¿El cambio de nombre no modifica la misión de la Reserva entonces? ¿Las funciones siguen siendo las mismas que se establecían en la anterior Lofan?

CFR: Las mismas, y allí hay que reiterar que la creación de la Reserva respondió a preceptos constitucionales, no fue un capricho del Presidente. El artículo 130 de la Constitución establece el deber de todos los venezolanos a defender la patria; el 134 dice que todos deben prestar el servicio militar o civil necesario para esa defensa, claro que sin ser sometido a reclutamiento forzoso; el 326 habla del principio de corresponsabilidad sobre el que se fundamenta la seguridad de la nación, es decir, que eso ya no es competencia de los militares solamente, es responsabilidad de todos y, por último, el 328 especifica que la Fuerza Armada es organizada por el Estado para garantizar la independencia y soberanía de nuestro país.

Entonces, ¿cómo se hacía para materializar esos preceptos?, si el Estado es el que organiza la Fuerza Armada de acuerdo a nuestras necesidades de seguridad y defensa, ¿no era competencia del Estado crear un cuerpo que permitiera a los ciudadanos cumplir con su deber de compartir la defensa de la nación? Es eso, está muy claro.

ABN: ¿Qué tiene qué decir frente a los comentarios que predicen la sustitución de los componentes militares por una milicia armada al servicio del Presidente?

CFR: Que es una gran falsedad. Aquí vuelvo a la necesidad de conocer la Ley para opinar con fundamentos. La nueva Lofanb, igual que la anterior, lo dice claramente: La Milicia Nacional Bolivariana tiene como misión complementar, com-ple-men-tar, a la Fuerza Armada en la defensa integral de la nación, y entrenar a los ciudadanos para el mismo fin. Eso es lo que hacemos, reforzar, relevar, complementar, esos son los verbos correctos.

Además de eso, hay un elemento novedoso entre las funciones de la Milicia y es el de orientar y apoyar a los consejos comunales en las áreas de su competencia “a fin de coadyuvar en el cumplimiento de las políticas públicas”, dice exactamente la Ley, eso quiere decir que podemos servir de enlace entre las comunidades y las instituciones que pueden resolver ciertos problemas.

El otro fin de nuestra relación con los consejos comunales es el de asesorarlos en la conformación de los Comités de Defensa Integral, para consolidar la unión cívico-militar de la que habla el artículo 326 de la Constitución, como ya lo señalé. Todo lo anterior se puede leer en el artículo 46 de la Lofanb, en las funciones 10, 11 y 12.

Ahora, esto de nuestro apoyo a los consejos comunales y la conformación de los Comités de Defensa Integral, hay que destacarlo, no es para militarizar a la sociedad, como se dice por ahí, tampoco es para reemplazar a las autoridades militares, más bien buscamos, como yo suelo decirlo, la socialización de nuestra Fuerza Armada. Estamos saliendo de nuestros cuarteles para ejercer una participación mucho más directa con las comunidades en la solución de sus problemas y en la defensa integral de la nación. Es importante dejar claro eso.

ABN: La nueva Lofanb dice que la Milicia Nacional Bolivariana está integrada por la Reserva Militar y la Milicia Territorial. ¿Cuál es la diferencia entre las dos?

CFR: Es sencillo, la reserva militar incluye a todos los venezolanos y venezolanas mayores de 18 años que hayan prestado el servicio militar, que han estado en los cuarteles pues, además de todos aquellos que se presentan voluntariamente en cualquiera de nuestros 49 batallones.

Las milicias territoriales están constituidas por todos los ciudadanos y ciudadanas que se organizan de manera voluntaria en sus comunidades, llámense consejos comunales, asociaciones de vecinos, juntas parroquiales, que se proponen llevar a cabo una acción de desarrollo en pro de la defensa integral de la nación, para eso no hay parámetros de edad.

ABN: ¿Un ejemplo?

CFR: Un ejemplo, el Consejo Comunal La Placera de la parroquia El Valle, constituido por 300 personas, vino aquí a decirnos “queremos registrarnos en la Milicia, participar activamente en la defensa de la nación”, entonces nosotros nos encargamos de asesorarlos, de brindarles el entrenamiento adecuado, además de todas las acciones que tienen que ver con lo social, con la solución de problemas.

Sin embargo, te reitero que no hay límites de edad para ser parte de las milicias territoriales, pero si un integrante de éstas desea recibir entrenamiento militar entonces ahí sí debe cumplir con el requisito de la mayoría de edad (18).

Hay algo que es importante resaltar y es que esos entrenamientos son efectuados sólo, y mil veces sólo, en instalaciones militares y a través de personal militar especializado, y que el armamento que se usa para ello se le suministra a las personas durante, y sólo durante, ese entrenamiento, no es que se lo pueden llevar a sus casas, no es que estamos armando o queremos armar a la gente, como se ha pretendido hacer creer.

ABN: Háblenos de esas acciones sociales que usted menciona, que escapan del ámbito militar.

CFR: Hay cifras concretas. A través de la Fundación Proyecto País y la Misión Miranda hemos logrado cosas importantes. Desde el 2007 hemos beneficiado al menos a cuatro millones de personas, mediante atención médica, módulos de suplementos alimenticios o dotación de instrumentos ortopédicos.

Por ejemplo, desde el viernes (26 de septiembre) y durante este fin de semana (27 y 28) estuvimos desarrollando una jornada de intervenciones quirúrgicas en el hospital Central de Higuerote (Miranda). Unas 500 personas fueron intervenidas por prolapsos, hernias, adenoides, o para ser esterilizadas, todo de manera gratuita, los exámenes pre operatorios, las operaciones, el traslado hasta sus casas y los estudios post operatorios.

Otra cosa, en tres años hemos logrado que 15 mil reservistas tengan un empleo digno tras recibir capacitación.

Claro, todo esto ha sido posible gracias al trabajo coordinado con otras instituciones del Estado, como Petróleos de Venezuela Sociedad Anónima (Pdvsa), el Banco Industrial de Venezuela, la Compañía Anónima Nacional Teléfonos de Venezuela (Cantv), diferentes ministerios, es decir, la Milicia no tiene los recursos para todo esto, pero nosotros tramitamos, gestionamos, canalizamos la solución de problemas con los organismos competentes.

ABN: Volviendo al tema de las controversias, ¿esta es la primera vez que el Estado venezolano cuenta con un cuerpo de Reserva? Y ¿es inusual que un país lo haga?

CFR: Para nada, el primer antecedente histórico de nuestra Reserva tuvo lugar el 3 de marzo de 1811, durante la primera República. El generalísimo Francisco de Miranda organizó un grupo de ciudadanos para combatir en Valencia, batalla en la cual salimos victoriosos. Bueno, ese grupo de milicianos fue comandado por el coronel Simón Bolívar.

Durante el Gobierno de Juan Vicente Gómez, a principios del siglo pasado, existía una reserva para cada una de las “fuerzas”; así es como se llamaban lo que ahora conocemos como componentes.

El 30 de mayo de 1987 se activó por primera vez el comando de la Reserva, constituida por 8 batallones. En el 2005 se creó el comando general de la Reserva Nacional y Movilización Nacional, con 22 batallones, y el más reciente hecho lo tenemos registrado en esta nueva ley, donde se crea el comando general de la Milicia Nacional Bolivariana, integrada ahora por 49 batallones, de manera que esto no es nuevo, lo que hemos cambiado es nuestra concepción de lo que debe ser la Reserva, y hemos avanzado: En 1996 teníamos 3 mil personas registradas y hoy día contamos con más de 150 mil.

Por cierto, el próximo viernes (3 de octubre) será el acto de transferencia del cuerpo de Reserva Nacional y Movilización Nacional a la Milicia Nacional Bolivariana en el Patio de las Academias (Fuerte Tiuna) y contará muy probablemente con la presencia del presidente Chávez.

Por otra parte, hay que decir que este no es un concepto único en Venezuela. Estados Unidos, por ejemplo, tiene su reserva; el ejército de ese país cuenta con aproximadamente un millón de integrantes, pero la reserva se acerca a los tres millones. Ese personal es el que envían a las guerras, claro, los que comandan y diseñan las estrategias son oficiales, pero la tropa, el soldado raso, es de la reserva, en su mayoría jóvenes de origen latino y africano. Rusia y Cuba también pueden citarse como ejemplos, ellos tienen sus respectivas reservas.

ABN: ¿Proyecciones?

CFR: Nuestra meta es organizar y tener registrados en la Milicia a 15 millones de venezolanos y venezolanas. ¿Cómo nos lo hemos planteado?, bueno, calculamos que en el futuro, en el mediano plazo, tendremos unos 50 mil consejos comunales constituidos en todo el país. Si logramos integrar a unas 300 personas en cada uno de ellos, ahí los tenemos. Hemos proyectado que esta meta la podremos concretar en unos 10 años.

ABN: Finalmente, ¿Qué debe hacer un venezolano o venezolana que desee formar parte de la Milicia?

CFR: Muy sencillo también, debe presentarse en cualquiera de nuestros 49 batallones, el más cercano a su casa, o en las circunscripciones militares. Los requisitos: ser mayor de 18 años, llevar la cédula de identidad, dos fotografías tipo carnet y llenar la planilla de ingreso, más nada. Las inscripciones están abiertas todo el año. El entrenamiento lo reciben dos sábados al mes, así que no es un impedimento para continuar con las actividades cotidianas, los estudios o el trabajo.


Angélica Antias


http://www.abn.info.ve/reportaje_detalle.php?articulo=883



sábado, 30 de agosto de 2008

La invasión vendrá por el Orinoco

La invasión vendrá por el Orinoco

Por: Braulio Martínez Zerpa
Fecha de publicación: 25/07/06


En otros artículos he planteado que existen tres hipótesis concernientes a una posible invasión de Venezuela por parte del Imperio Yankee: la primera, que correspondería a una invasión directa por parte de dicho imperio; la segunda, se realizaría a través de la utilización de un tercer país; y, la tercera que se correspondería con una combinación de las dos anteriores. Ahora analicemos por separado cada una de estas hipótesis:

PRIMERA HIPÓTESIS: Invasión directa por el Imperio Yanqui.

Comenzaremos analizando el carácter de ése pueblo. El pueblo Yanqui es, en principio, un pueblo gavillero, pandillero y patotero; individualmente son sumisos y sin atrevimiento suficiente para emprender cualquier operación riesgosa, sólo lo hacen cuando se juntan en partidas y, siempre y cuando exista una superioridad numérica y tecnológica abrumadora por parte de ellos. Así vemos como en las últimas invasiones de este Imperio estos elementos han estado presentes; veamos: Yugoslavia, un País pequeño, prácticamente desarmado y sin el apoyo de la extinta Unión Soviética (nunca lo hicieron cuando Yugoslavia era parte de ese otro Imperio). Afganistán: un País sin fuerzas armadas, su defensa era ejercida por grupos de milicianos que fundamentalmente contaban con su coraje como arma defensiva predominante, allí nuevamente la pandilla hizo de las suyas. Iraq: éste País fue sometido a un constante bombardeo durante un tiempo aproximado de diez años, de manera de debilitarlo lo suficiente como para que los riesgos sean imperceptibles. Recuerden que durante la llamada guerra del desierto, papá Bush no se atrevió a invadir Iraq, ya que, según sus propias palabras los riesgos iban a ser muy grandes, a pesar de que para ese entonces la superioridad del Imperio era significativa. Ellos escogen a países pequeños como posibles contendientes; ejemplo; Corea del Norte, Cuba, Venezuela y otros, donde su superioridad sea la indicada para que la pandilla se imponga; pero, no vemos que desafíe a cualquier país de mediana fortaleza, porque las pandillas lo que esconden detrás de sí es su gran cobardía.

Cómo operaría la estrategia del Imperio en la materialización de ésta hipótesis, en base al modus operandi patotérico ya analizado. En primer lugar, nos someterían a un sistemático bombardeo con el fin de destruir nuestra Fuerza Armada; atacarían nuestras industrias básicas, entre ellas a nuestras represas generadoras de electricidad, nuestros embalses de agua potable, nuestros puertos y aeropuertos, carreteras, puentes, medios de transporte, etc, etc.. Después, la pandilla puede invadir y para ello utilizarían desembarcos anfibios en nuestras costas, fundamentalmente a través del Orinoco, ya que en esa zona se encuentran objetivos estratégicos fundamentales: tales como: La faja petrolífera del Orinoco, las fuentes de hidro-electricidad, el hierro, el aluminio, el uranio, etc. Una invasión a través del Orinoco tendría la ventaja, para el invasor, de partir el País en dos espacios geográficos, privándonos de entrada de todos estos recursos vitales a nuestra existencia; y, a partir del mismo Orinoco realizar ataques en pinza hacia el Norte, lo cual facilitaría la consolidación de todo el territorio nacional. Nuestro Libertador Simón Bolívar vislumbró ésta ventaja estratégica (recuérdese la Campaña de Angostura), que a la postre, a través de la Batalla de Carabobo, nos dio nuestra independencia.

Ahora bién, nos quedaría, como acto seguido, responder a la pregunta de QUÉ HACER. Lo primero que tendríamos que realizar sería dotar a estas fuentes hidro-eléctricas de suficiente defensa tierra-aire, tanto de baja, mediana y gran altura para evitar el bombardeo aéreo ( si no las tenemos debemos adquirirlas de inmediato). Estas unidades de defensa aérea deben, igualmente, instalarse en nuestros aeropuertos, puertos navales, bases aéreas, bases navales, fuertes terrestres, dependencias oficiales, embalses de agua, en puentes importantes como el puente sobre el Lago de Maracaibo y sobre El Orinoco, refinerías, oleoductos, campos petroleros, poblaciones importantes, etc.

Muy importante, las islas tales como: Margarita, La Tortuga, La Orchila y los Roques deben ser fortificadas, tal y como hicieron los españoles durante la colonia, para evitar que sean tomadas para controlar el tráfico marítimo, para que sirvan de puerto a las naves imperiales de guerra o que sirvan para instalar bases de cohetes contra tierra firme.
Cualquier desembarco a nuestras costas sólo es posible hacerlo en zonas de playa o de puertos, en consecuencia, deben ser observadas cuidadosamente, a través de reconocimiento aéreo, así como disponer de fuerzas móviles para contrarrestarlos.

En cuanto a la aviación de combate, en un artículo publicado recientemente en estas páginas, denominado Carta Abierta al Ciudadano Presidente de la República, en Relación a la Adquisición de los sukhoi-30, expresé que en vez de comprar 24 aviones, comprara 30 y creara con ellos la Escuela Avanzada de Combate, para entrenar a nuestros pilotos de caza; y que, adquiriera 72 aviones Sukhoi 35, que tiene mayores prestaciones que el Sukhoi 30, tiene un mayor radio de acción, lleva más cargas externas, puede lanzar cohetes aire-aire al doble de la distancia ( 400 Kms.), lleva cohetes que pueden hundir un porta-aviones. En síntesis, esta sería el arma ideal para disuadir al Imperio de no cometer la locura de invadirnos, porque donde hay riesgos para ellos no invaden, tan sencillo como eso.

En cuanto a la defensa del Orinoco, existen unos misiles submarinos fabricados en la hermana República de Irán, que está considerado como el más veloz del mundo (360 KPH), el cual es cuatro veces más veloz que un torpedo. Rusia tiene uno de igual características denominado VA 111 Shkval, que son capaces de hundir cualquier barco o submarino; yo recomiendo que se adquiera un número significativo de estos misiles submarinos a objeto de colocarlos en nuestras naves de guerra, puertos y en la desembocadura del Orinoco, concretamente en Macareo, creando un Puesto Fluvial en dicho sitio. Igualmente, deben colocarse lanchas torpederas entre Macareo y la desembocadura del Río Arauca.

SEGUNDA HIPÓTESIS: Invasión a través de un tercer País.

Si cumplimos con la defensa y equipamiento antes señalado, entonces, es muy probable que el Imperio no se decida a correr los riesgos de un ataque directo y recurra a un tercer país, que no puede ser otro que “la hermana” República de Colombia y para lo cual han creado el llamado Plan Colombia; sin embargo, dada la amistad y entendimiento de los Presidentes de ambas Repúblicas, ésta hipótesis es poco probable que se lleve a cabo, pero hay que prepararse por aquello de que “donde manda capitán no manda marinero” y todos sabemos que el Gobierno de ese País es un seguidor incondicional del Imperio.

Para esta hipótesis es válido todo lo dicho para la analizada anteriormente, pero con la añadidura de que la aviación de combate cobraría una importancia capital, dado que nos permitiría neutralizar toda su infraestructura. Esto nos obliga a adquirir los 72 aviones Sukhoi 35 con toda su carga mortífera, igualmente, dotarnos de armas anti-tanque y lanza cohetes tierra-aire.

TERCERA HIPÓTESIS: Una combinación de las dos hipótesis anteriores.

Esta, a la luz de éste análisis luce como la más probable, debido a que los ataques nos vendrían tanto por el Norte, el Este como por el Oeste, por lo tanto, no debemos escatimar en los gastos necesarios para defendernos o de lo contrario seremos nuevamente COLONIA.

Braulio Martínez Zerpa, coronel de Aviación en situación de retiro y abogado de la República.

brauliomartinez@cantv.net



http://www.aporrea.org/tiburon/a23847.html

viernes, 8 de agosto de 2008

Aviones Rusos

Desde mi refugio

Aviones Rusos

Por: Alberto Müller Rojas*

Fecha de publicación: 07/05/06



Pareciera que el Gral. Maximiliano Hernández, ex Comandante de la Aviación Militar venezolana, recibió su diploma de Estado Mayor en una botella de refrescos. Declaró recientemente una necedad: que la compra de aviones venezolana obedece a una manifestación política por el enfrentamiento con los EEUU. Se podría preguntarle ¿qué razón impulsó la compra que él realizase de los aviones F-16? Una compra que personalmente cuestioné, en mi condición de Jefe de la División de Operaciones del Estado Mayor Conjunto, en sus términos originales. ¿No tenía aquella adquisición una motivación política dado el enfrentamiento, no de Venezuela sino de los EEUU, con la URSS. ¿No tiene todo acto estratégico –y la adquisición de material de guerra por un Estado forma parte de su estrategia genética[1]- un significado político? Se podría admitir como lo señala Maximiliano que en este caso las líneas de abastecimiento de repuestos son muy largas. Pero acaso, en el contrato de adquisición de los F-16 (no hubo tal contrato sino una simple carta de intención) se preveía la transferencia tecnológica contemplada en las actuales contrataciones que asegurarían, dependiendo de la voluntad propia, la autonomía estratégica correspondiente. ¿No pretendía este oficial sustituir toda nuestra aviación de combate por el caza-bombardero yanqui, sacrificando la variedad de proveedores que nos aseguraba esa relativa independencia?. Esto último el hecho que motivó mi oposición, hecha pública por la revista Resumen, al programa inicial de adquisición.

Las respuestas a las anteriores interrogantes deja claro que el compromiso del citado general era con los abastecedores gringos y no con el Estado venezolano. Y al parecer ello continúa siendo así. O es que no entiende Vásquez que la transferencia de armas no es un negocio cualquiera, sino una transacción que implica coincidencias políticas, con posibles consecuencias en alianzas estratégicas entre estados que tienen intereses comunes. ¿No son semejantes los objetivos de la política exterior rusa y venezolana, cuando ambos buscan la vigencia de un orden internacional multipolar en contra del unilateralismo estadounidense? ¿Alguna vez paseo sus ojos el ilustre general, siquiera sobre algún artículo que estudiase los problemas geopolíticos de la actualidad, incluyendo entre ellos los publicados por Zbigniew Brzezinnski, el especialista en la materia más reputado en los EEUU? Estoy seguro que no, porque si así fuese conocería los objetivos estratégicos yanquis y entendería la oposición, realmente frágil del gobierno venezolano, pero si concreta de gobiernos como el ruso, el chino, el hindú, el francés y el alemán. Sin dudas, al oír sus opiniones, tenemos que concluir, o que se trata de un lego en la materia, o de un tonto útil. Conociéndolo, creo que es las dos cosas.

Pero su ignorancia no se queda allí en el terreno estratégico. También abarca el campo táctico, de donde se puede inferir que su diploma de estudios en este ámbito, propio de los tenientes y capitanes, también es chimbo. Cuando afirma que rompe la “doctrina aérea” la asignación de los helicópteros rusos, recién llegados al país, a la Aviación del Ejército, ratifica que no sabe diferenciar una operación aerotransportada, propia del componente aéreo de la Fuerza Armada, de una aeromóvil, característica de la guerra terrestre actual. No está al corriente que desde la década de los 70 los helicópteros han venido sustituyendo a los tanques, que a su vez reemplazaron a la caballería hipomóvil en las operaciones de reconocimiento, envolvimiento y desbordamiento propias de las maniobras tácticas terrestres. En resumen, este oficial no califica como analista militar. Es posible que haya sido un buen piloto. Pero esa habilidad sólo lo coloca en el timón de una aeronave, no lo ubica como un líder castrense ni como un orientador de la opinión publica en materia de defensa. Lo que un profesional conciente busca es la credibilidad, y ella solo la proporciona su dominio de la teoría, praxis y práctica de su oficio. Por ello es siempre sabia aquella recomendación contenida en las tapas de las cajas de fósforos que decía “antes de opinar, infórmate” Y esto es más válido en una cuestión tan seria como la guerra, donde esta en juego el destino de los pueblos. Tal asunto no puede ser materia de politiquería barata como la que hoy hace la oposición en Venezuela, incluso a costas del dolor ajeno.


[1] La praxis destinada a fortalecer el poder militar de un Estado

* alberto_muller2003@yahoo.com


http://www.aporrea.org/internacionales/a21694.html

viernes, 25 de julio de 2008

La Guardia Territorial y la explosión del Poder Popular

La Guardia Territorial y la explosión del Poder Popular

Por: Alberto Müller Rojas*
Fecha de publicación: 28/03/07


ESPECIAL PARA “VEA”

Han sido constantes, desde que en la Ley Orgánica de la Fuerza Armada se introdujo la Guardia Territorial como parte del aparato de defensa nacional, las presiones internacionales, e internas para ilegalizarla. Y ello es lógico. Por una parte, este elemento estratégico para la seguridad del Estado, sería el actor fundamental en la guerra de resistencia contra el terrorismo bélico aplicado por el Imperio en su afán de dominio sobre el sociosistema. Por otra, al ser el elemento clave para la transformación de la defensa de una tarea corporativa en una función social, el excluirla mantendría a la institución militar, en condición de estamento social, como un poder supraestatal, con capacidad de cambiar la naturaleza del régimen político, libremente legitimado por el pueblo. En esas condiciones no sería extraño, que, incluso, desde las fuerzas activas profesionalizadas se generasen presiones en esta dirección, que acompañaran las que ejercen los factores que resisten el proceso de cambio, actualmente en marcha en Venezuela. La metamorfosis realizada en el ámbito militar, por el cambio de su estructura, les quita a los profesionales del ramo una capacidad de chantaje que les permitía mantener privilegios contrarios a la condición democrática del país, y más allá, a la posibilidad de modernización de nuestra comunidad política.

La Guardia Territorial, en la nueva estructura defensiva del Estado, sería un elemento que proviene directamente de los centros comunitarios, que agregan efectivamente el poder popular. Y, por lo tanto, sería una expresión concreta de la voluntad del pueblo de defender su soberanía. Sin ella, la democracia participativa sería una entelequia. El simple despliegue de las fuerzas militares convencionales, como ocurría en el pasado, anularía cualquier iniciativa popular, como la desarrollada el 13 de abril del 2002, contra la usurpación del poder público.

Lógicamente, la Guardia Territorial, como elemento de la estructura militar, no es autónoma del control de la cadena de mando militar. Sus unidades de acción deben estar inscrita como tales en el Comando de la Reserva y Movilización Nacional, dependiendo de este tanto operacional como administrativamente, tal como lo establece la LOFA. Caso contrario, cualquier grupo independiente, con capacidades para el ejercicio de la violencia, sería simplemente una banda de delincuentes. No es este elemento el ejército paralelo, que la propaganda adversa presenta como amenaza a las fuerzas activas y a la reserva. Es un instrumento adicional que complementa sus capacidades.

Dentro de estas consideraciones, tales presiones resultan inaceptables, y serían contradictorias a una de las políticas fundamentales de la revolución, que intenta provocar la explosión del poder popular. Y no es sólo por ello. Su admisión colocaría a Venezuela en un estado de indefensión frente a la amenaza presente de una acción militar directa del Imperio. Una situación en la cual este elemento juega un evidente papel disuasivo. No se le puede prestar atención a palabras necias.

* alberto_muller2003@yahoo.com


http://www.aporrea.org/actualidad/a32549.html

viernes, 20 de junio de 2008

Las zonas residuales y la Defensa Nacional

Las zonas residuales y la Defensa Nacional

Por: Alberto Müller Rojas
Fecha de publicación: 02/10/06


La mayor parte de nuestras zonas limítrofes corresponden a lo que en términos geopolíticos se denomina como espacios residuales. Estos son zonas fuera del área efectiva del Estado. Un área caracterizada por su contribución positiva al sostenimiento económico del país, y definida por la presencia de una red vial y comunicacional que permiten los flujos intersocietales (comercio, migraciones e ideas). Tales espacios residuales, por el contrario, tienen densidades de población menores a 10 habitantes por kilómetro cuadrado, carecen de sistemas viales, tienen insuficiencias en los servicios estatales normales, entre ellos los de telecomunicaciones, educación, salud, seguridad social, y no ofrecen las formas de estabilidad y seguridad que garantiza el Estado. Se trata de áreas incapacitadas en esas condiciones para soportar operaciones económicas que tiendan a la producción masiva de “bienes” de consumo. En nuestro caso, la mayor parte de estos espacios están cubiertos por selvas tropicales húmedas generadoras de importantes corrientes de agua dulce, además de poseer substanciales reservorios de minerales estratégicos. Un hecho que los convierte en zonas de valor geopolítico y, por ende, en objetivos estratégicos para las grandes potencias que tienen intereses hegemónicos dentro del sistema internacional.

Con ese carácter de objetivo estratégico, los EEUU, en asociación con la oligarquía venezolana, habían venido desarrollando una estrategia de doble acción sobre nuestros espacios residuales limítrofes. Por una parte, su militarización bajo la coartada de las guerras contra el narcotráfico y el terrorismo. Las confrontaciones espectáculo que permiten a esa hiperpotencia la intervención militar directa en aquellas áreas que son de su interés geopolítico, cuando las sienten amenazadas por sus rivales o por fuerzas internas del país que antagonizan el esquema de dominación institucionalizado. Por otra parte, la socialización de los aborígenes en el marco de la cultura capitalista, a través de misiones religiosas como la de las “Nuevas Tribus”. Con la primera línea de acción se pretende negar el acceso a esas regiones proverbialmente usadas como refugios, a nacionales y extranjeros marginales, para sobrevivir en ellas dentro de una economía de subsistencia, con prácticas tradicionales de carácter artesanal, especialmente vinculadas en nuestra Amazonia y Orinoquia con la minería de metales preciosos. Esas poblaciones les representaban un riesgo a sus intereses, pues, al adquirir derechos sobre esos espacios, impedían su apropiación progresiva por parte de empresas –en su mayoría transnacionales- para la explotación industrial de tales recursos, con la correspondiente incorporación de su producción al mercado globalizado. Y la aplicación de esa estrategia no era una tarea para unidades militares o paramilitares organizadas y apoyadas desde el Pentágono, o por servicios de seguridad mercenarios financiados directamente por el tesoro de los EEUU. Era una actividad realizada por la organización militar venezolana, en el papel de fuerza pretoriana que le asignase el régimen consensual acordado mediante el llamado Pacto de Punto Fijo, directamente asociado con la estructura de poder usamericana. Servía el “combate” a estos “enemigos” para justificar las adquisiciones de armas, protegidas por un supuesto secreto estratégico, generadoras de jugosas comisiones para la cúpula militar, con las cuales se compraba su lealtad a los intereses de un régimen coaligado mediante el Tratado Interamericano de Defensa (TIAR) con el aparato de poder yanqui. En esas condiciones, era suficiente vincular esos grupos indómitos con las actividades del narcotráfico o el terrorismo, para legalizar el empleo extrajudicial de la fuerza en reemplazo de la acción policial, enmarcada en el derecho, que haría efectiva la presencia del Estado, con su papel ordenador y estabilizador, en esas regiones.

Por su parte, la aculturación de la población indígena, a través de la socialización alienante, tendría un doble propósito. En el corto plazo, y dentro de las prácticas del colonialismo, su incorporación como fuerza de trabajo barata para las actividades productivas de las empresas que allí se fuesen estableciendo. Pero en el largo plazo, la creación de una base poblacional, con un potencial secesionista, que permitiese eventualmente la creación de un Estado virtual, dependiente del Imperio en calidad de protectorado. La labor que trató de hacer Reagan con los indios miskitos en su agresión a Nicaragua. De ese modo se obtendría contingentemente el dominio de esa zona con valor geopolítico, que le daría ventajas estratégicas al gobierno de Washington para adelantar sus aspiraciones de controlar unilateralmente el sistema internacional. Lógicamente, la decisión gubernamental de expulsar las llamadas “Nuevas Tribus” reduce considerablemente este riesgo, aun cuando se tiene que considerar que parte del daño ya esta hecho.

Pero esa decisión liberadora tuvo como resultado una profundización de la militarización de esos espacios. No tenían las instituciones del poder nacional, ni las de los poderes estadales ni locales, las capacidades para extender su ámbito de acción hasta esos grandes espacios carentes de infraestructuras de toda naturaleza suficientes para soportar las operaciones administrativas de esas instancias de gobierno. La solución al problema fue la aplicación, para la población indígena de esas regiones, de los programas sociales de emergencia diseñados dentro de la política inclusiva implementada en el área efectiva del Estado con propósitos incorporadores de la marginalidad. Una gestión que sería apoyada y coordinada, no sin dificultades, por los medios logísticos de la FAN. De hecho ha representado un esfuerzo considerable el reentrenamiento del personal de oficiales y tropas para cambiar sus técnicas operacionales asociadas al empleo convencional de los equipos, en acciones bajo condiciones inusuales. Tal vigor ya ha representado pérdidas irrecuperables en vidas humanas y daños materiales significativos que consumen los recursos dedicados a la defensa nacional. Pero ninguna política ha sido formulada para atender los grupos indómitos de venezolanos, e incluso extranjeros refugiados en el territorio nacional, cuyo devenir es sostenido en esas apartadas regiones por sus actividades económicas de subsistencia. Sin dudas, esas labores tienen una alta potencialidad depredadora del ambiente, especialmente potenciada por la forma desordenada como se realizan. Pero en términos generales, ellas no son más dañinas que la mayor parte de las actividades productivas organizadas realizadas con escasos controles estatales. La diferencia es la indefensión de los primeros, frente al poder de los últimos.

Bajo estas circunstancias los actores militares con presencia en el área, a quienes se les ha dado las funciones policiales referentes al mantenimiento de la seguridad y el orden público, continúan procediendo, dentro de la fuerza de la inercia, con las prácticas extrajudiciales que caracterizaron la acción castrense en las áreas fronterizas. Se olvidan de la condición de ciudadanos que tienen los miembros de esas poblaciones que les da el derecho de libre transito por el territorio nacional y de emprender en él las actividades económicas que les faciliten su desarrollo físico y psicológico. No hay diferencia entre el uso que le dan estos informales a los espacios residuales, al que le dan los buhoneros a los espacios públicos urbanos. Con la excepción de que los últimos actúan en áreas sujetas al escrutinio público, y los primeros lo hacen en espacios apartados despoblados. De modo que así como los informales urbanos no pueden ser considerados como enemigos invasores, ni siquiera como delincuentes, aquellos tampoco deben considerarse como contendientes y sus acciones, en caso de ser delictivas, no pueden reprimirse de otra forma sino dentro del ámbito jurisdiccional.. No obstante, muchos de los conductores militares que dirigen estas operaciones continúan actuando dentro del dogmatismo impuesto por la doctrina difundida por las misiones militares estadounidenses durante el medio siglo que estuvieron tutorando nuestro desarrollo militar. Perdieron la capacidad de pensar para diseñar conductas apropiadas para la defensa del Estado, que bajo ninguna circunstancia esta amenazada por los sectores excluidos de nuestra sociedad.

Obviamente la acción encomendada al Comando Estratégico Operacional en los espacios residuales fronterizos, dado su valor geopolítico intrínsico, debe considerarse como una operación de defensa. Pero ella se ubica más en el ámbito de la estrategia genética (fortalecimiento del poder), que en el correspondiente al de la estrategia operacional. Por sus características geográficas, y en el marco de nuestra hipótesis de guerra más probable, planteada dentro de los lineamientos de la guerra asimétrica, esas zonas tienen un valor táctico inestimable. Constituyen una barrera casi insalvable para todo tipo de operaciones convencionales, especialmente aprovechable dentro de una praxis sustentada en una noción extremada de la defensa móvil. Pero esa utilización demanda la construcción de un mínimo de infraestructuras capaz de soportar las operaciones tácticas, y desde luego, con aplicación civil, dentro de un plan de desarrollo sustentable que no afecte los rasgos básicos ambientales que le proporcionan su importancia geopolítica para Venezuela. Un proyecto que no puede ignorar la población, incluyendo el sector marginal segregado de la sociedad moderna. Se trata de formular una estrategia, no para el combate, sino para el desarrollo dentro de las misiones generales que se le adjudican a la FA, y la específica que en ese campo se le asigna a ese Comando Estratégico Operacional.


http://www.aporrea.org/tiburon/a25775.html

domingo, 25 de mayo de 2008

Sun Tsu y el imperialismo

Sun Tsu y el imperialismo

Por: Alberto Müller Rojas
Fecha de publicación: 13/04/07


Veo al militar de una manera distinta a la forma que subyace en el pensamiento de Sun Tsu. Lo concibo de la manera como lo hace Karl von Clausewitz. En la tesis del antiguo erudito chino, el soldado es un simple siervo del rey – o de quien acumula el poder- y el ejercicio de su oficio consiste en el uso de la máxima crueldad, con los suyos y con los enemigos, para asegurar el orden que impone el monarca. Naturalmente una noción irracional. Ese fue el pensamiento militar que se forzó durante la guerra fría, en ambos bandos de la contienda. No por azar, fue durante ese período cuando se difundió ampliamente la obra de Sun Tsu. Era conveniente para los dos imperios que se disputaban el control del planeta. Con ella se contribuía a alienar las mentes de los militares que realizaron las guerras de conquista, que le permitieron a aquellas superpotencias dominar amplias regiones del planeta. Desde luego, la obra ha tenido un efecto en los militares yanquis, que aun continúan, mediante el terrorismo bélico, intentando consolidar, las posesiones imperiales que le han dado la hegemonía en el sistema internacional. Sin dudas, esta forma de ver al soldado explica la psicología de la incompetencia militar, tan bien estudiada, por el inglés Norman F. Dixon.

Diferente es la concepción de Clausewitz, que racionaliza el oficio al considerarlo como parte de la actividad política humana, colocando al poder moral en el mismo nivel que las capacidades destructivas físicas. Un poder que adquieren los ejércitos, cuando las motivaciones de sus soldados, corresponden a los valores éticos de las sociedades que defienden. Eso aclara, por ejemplo, el triunfo de las fuerzas militares vietnamitas, infinitamente inferiores a los ejércitos desplegados sucesivamente por Francia y EEUU. Lo mismo que esclarece el empantanamiento de las fuerzas militares de este último país en Afganistán e Irak. Son simplemente incompetentes para resolver un problema político, por cuanto sus soldados, o son psicópatas, o están alienados, como lo analiza Dixon.

En una versión más contemporánea del pensamiento de Clausewitz –la de Thomas Schelling- el soldado es un negociador. Actúa en los procesos de negociación, que llama tácitos, usando la fuerza, únicamente en la medida necesaria para lograr los objetivos políticos, dentro de una racionalidad de costo/beneficio. Una racionalidad que complementa las negociaciones explícitas, esencialmente políticas. Relacionadas con la convivencia de las diversas formas de agregados humanos. Es una concepción que corresponde a la noción clausewitziana de la “guerra real”, que es la racionalmente materializable, pues finaliza cuando ella amenaza a la disolución de las comunidades políticas enfrentadas. Las guerras, que él identifica como “total” –exterminio de la sociedad adversaria- y “absoluta” –destrucción de la fuerza militar del enemigo- son irracionales. Basta ver la guerra absoluta desarrollada contra Irak, para comprender lo ilógico de esta acción. La preservación de la capacidad militar del enemigo, una vez vencido, es garantía de orden.


http://www.aporrea.org/tiburon/a33213.html

viernes, 25 de abril de 2008

Socialismo y la Defensa Nacional

Socialismo y la Defensa Nacional

Por: Alberto Müller Rojas
Fecha de publicación: 26/09/06


El líder de la Revolución Bolivariana, y Jefe del Estado venezolano, Hugo Chávez, ha adoptado definitivamente el socialismo como marco conceptual para impulsar el cambio estructural de la nación. Es una decisión atrevida que ha impactado la conciencia de los miembros de la audiencia nacional y a la opinión pública internacional. Es este hecho justamente lo que le imprime el carácter revolucionario a su actuación. Antes de esa declaración, su conducta política podría haberse considerado como la de un simple reformador. Un administrador político inclinado a introducir modificaciones formales para ajustar el comportamiento del Estado a las corrientes dominantes en el marco del sistema internacional. Positivamente, al acoger este planteamiento teórico se ha convertido en líder de un movimiento que trasciende las fronteras nacionales, con autoridad e influencia especialmente en el ámbito americano. Y el simple hecho de que la dirección política de la primera potencia mundial lo colocase, al adversarlo personalmente, como un actor individual de primer orden en el escenario político-estratégico internacional, lo consagra como una figura mundial. Un hecho que le devuelve al país y su gente –por ser él expresión de la voluntad de la mayoría nacional- el papel que jugara a finales del siglo XVIII y principios del XIX en el marco de la revolución política impulsada por El Iluminismo. El movimiento intelectual, que en el contexto del humanismo, liberó al hombre de las ataduras que le imponía la hierocracia irracional –lo que el sociólogo alemán Max Weber llamó “el cesaropapismo”- para substituirla por la democracia racional sustentada en la lógica del conocimiento.

El atrevimiento yace no solamente en la adopción de un pensamiento desprestigiado por una aplicación brutal y desviada por parte de un partido comunista –el de la URSS- que confundió la idea de “vanguardia”, señalada por el materialismo histórico, con el ejercicio oligárquico del poder por parte de la dirigencia de esa organización política. Se profundiza esta audacia con el enfrentamiento a la satanización del socialismo por parte de las fuerzas conservadoras en el marco de la guerra fría. Estas, lejos de debatir sobre los aspectos esenciales de la teoría, la descalificaron mediante un ataque a su aplicación por un sujeto histórico concreto, el sistema soviético. Un hecho que podría compararse con la inhabilitación de la propuesta evangélica del cristianismo, por la actuación del fascismo en España, apoyado por el alto clero católico y el Opus Dei. Todo planteamiento teórico, como toda postura estratégica, no es bueno ni malo por si mismo. Su eficacia depende de la forma como se aplica. Es decir de la táctica, que es la manera como en la práctica se materializa el encuentro de la idea con la realidad. En ese sentido no es la concepción la que fracasa. Es la acción de los hombres que dirigen su ejecución la que naufraga. De allí la importancia de la formación de cuadros adecuados para adelantar la acción.

Pero la formación de tales cuadros no radica en su adoctrinamiento. El uso de esa técnica alienadora llevaría al dogmatismo irracional de las hierocracias, alejando cualquier proceso de la democracia impulsada por el humanismo, con su lógica científica. La educación de esos equipos de mando y de trabajo es una tarea pedagógica sustentada en el desarrollo de su capacidad crítica, dependiente del dominio de los procesos de análisis. Es en esa facultad en donde radica la posibilidad del debate (la confrontación de ideas), e incluso de la polémica (el ataque y la defensa estratégica), útil tanto para el enfrentamiento de las antitesis, en unas relaciones sociales que son en esencia, como lo señala el materialismo histórico, dialécticas, como para el mantenimiento de un comportamiento táctico eficaz por parte de las fuerzas que conforman el movimiento propio. Fue el uso del adoctrinamiento, que convirtió los cuadros revolucionarios soviéticos, y los de los llamados partidos comunistas ortodoxos, en fanáticos integristas, una de las variables que explica el fracaso de lo que se llamó el “socialismo real”. El socialismo impuesto en el llamado “bloque soviético”. El fanatismo conduce a una polarización de la realidad, de la cual se apartan los más racionales, convirtiéndose en apáticos, lo que le resta fuerzas a la idea, al hacerla equivalente a los instintos, esencialmente ilógicos, exhibidos por las fuerzas conservadoras de la sociedad, que defienden el derecho del dominio de los más fuertes sobre los débiles. Una conducta totalmente darviniana que mantiene al hombre en el mundo de natura, alejándolo del edificado por la cultura.

Es por el análisis de la derrota del “socialismo real”, que las corrientes que impulsan el llamado “socialismo del siglo XXI”, en el cual se inscribe la orientación teórica del régimen político venezolano, aceptan la idea del pluralismo – la convivencia de modos de pensar distintos, incluso dentro de los mismos movimientos socialistas- como parte significativa de su praxis (estrategia) y su práctica (táctica). Sin la existencia de la dialéctica –que implica el debate y hasta la polémica- se hace imposible el ascenso humano. Por ello, la idea de las fuerzas conservadoras de suprimir las diferentes ideologías mediante la imposición de la noción del “fin de la historia”, que colocó su triunfo sobre el socialismo real como un escenario para la lucha de todos contra todos en el espacio virtual (imaginario) del mercado, donde sólo sobrevive el más fuerte. El socialismo ha revertido la concepción clausewitziana sobre la guerra como continuación de la política por otros medios, para colocar a esta como la continuación de la guerra con otros instrumentos. Ciertamente, en las sociedades primitivas, y en las civilizaciones paternales, de las cuales se derivan las actuales, el orden –razón de ser de la política- se imponía básicamente por la fuerza. Fue la revolución humanista el hecho histórico que introdujo en la existencia humana la posibilidad de sustituir la guerra por la negociación explícita, característica de la política, realizada mediante el dialogo y el debate sobre las ideas relacionadas con el orden social, la que limitó el uso del poder puro para imponerlo. Es en ese momento donde se gestan los partidos y movimientos ideológicos que serían los instrumentos fundamentales del quehacer político Si bien es cierto, que en la civilización occidental –dentro de la cual se produjo esta revolución como consecuencia de la revolución industrial producto de la científica- se habían derivado avances importantes a partir de las ideas de los filósofos cristianos, que rescataron la noción griega de la democracia, fue la adopción del humanismo lo que permitió la aceleración del proceso de ascenso humano.

Un proceso que tiene como fin la eliminación de la miseria y la pobreza –persistente tercamente hoy en día- que han aquejado históricamente a la mayoría de los seres humanos. Unos rasgos que no solamente están referidos a las carencias y limitaciones en relación con los insumos físicos necesarios para la sobrevivencia, sino que incluyen, de manera dominante, la ignorancia asociada a la impotencia. Una invalidez que coloca a los hombres en la condición de animales. De allí el crecimiento exponencial de la violencia social de carácter delictivo, que presenta niveles de intensidad muy altos especialmente en los sectores populares, victimizados por la violencia psicológica y económica de los fuertes. Casi todos los criminólogos serios, coinciden en colocar las conductas transgresoras como un resultado de las elementales condiciones de vida de los infractores. De allí, que en esas circunstancias, la seguridad pública –la garantía de protección de las personas y sus bienes – alcance sus niveles mínimos, incrementando los riesgos de quienes han alcanzado estadios superiores en su modo de vida. Pero no sólo ello. Tales ocurrencias están asociadas con formas espontáneas de protesta pública (disturbios sociales), y hasta actos de rebelión, que impiden la gobernabilidad en las comunidades políticas, frenando el ascenso sistemático del conjunto. Es un cuadro con impacto en el sistema internacional, en el cual, las fuerzas conservadoras que tienden a dominarlo, por la ausencia de mecanismos políticos eficaces, dado su comportamiento instintivo, utilizan el poder puro (la fuerza militar) como herramienta para controlar tales situaciones desorganizadoras, o evitar la búsqueda de respuestas autónomas racionales por parte de estados pequeños o medianos, que tendrían potencial de perturbar el orden jerarquizado internacional impuesto por el brutal ejercicio de la violencia política (la guerra).

En ese cuadro se ha encontrado la población venezolana desde que rompió con el orden colonial, de naturaleza hierocrática, que dominó el país por trescientos años. Ha sido una dialéctica que ha tenido expresiones polémicas, especialmente agudas durante el siglo XIX, cuando la principal manifestación fue la “guerra federal” (1859-63), junto a exposiciones contencioso-políticas, en las cuales ha dominado la negociación explícita. Ciertamente Venezuela fue un escenario, y sus hombres fueron actores privilegiados de esa revolución política inspirada en El Iluminismo. No hay dudas que el Generalísimo Francisco Miranda y el Libertador Simón Bolívar fueron protagonistas importantes tanto en el debate como en la polémica, que condujeron a la difusión universal del pensamiento humanista. Las ideas inspiradoras del gran proceso transformador de las estructuras políticas y sociales de los diferentes conjuntos civilizatorios que convivían en su época, dando origen a una etapa histórica, que ha acelerado la tendencia hacia una integración cultural humana a escala universal, distinguida con el nombre de modernidad. Un período en el cual el obrar de la humanidad se pensaba que se realizaría dentro de las leyes de la razón, lo que teóricamente le permitiría avanzar hacia la abundancia, la libertad y la felicidad. No obstante, la aplicación del humanismo se encontró frente al hecho concreto de la irracionalidad de las ideas de la libertad, la felicidad y de las necesidades individuales. Son valores (objetos de preferencia), que únicamente adquieren significado en el individuo según sus gustos estéticos y sus concepciones morales. Una situación que demandó de una estrategia, con objetivos concretos, y una táctica que definiese metas logrables en el espacio y en tiempo. En ese espacio se planteó un nuevo cuadro dialéctico que enfrentaba a quienes privilegiaban la libertad (liberales) con aquellos que priorizaban la igualdad (socialistas) Incuestionablemente los primeros, fundamentados en una gran falacia que equipara la libertad de vida, de pensamiento o cualquier otra de las fundamentales del ser humano, con la libertad de invertir, de tener empresas, o de enriquecerse, representaron al sector conservador. Se ha tratado de una posición que ha permitido mantener la fuerza de la inercia (posición que define la actitud darviniana de esta corriente) que tiende a amparar el orden jerarquizado de las sociedades, opresor de las clases o estamentos inferiores. Aquí nuevamente se planteo la dialéctica entre las fuerzas conservadoras, motivadas por la noción de la democracia representativa de inspiración liberal, con las de cambio, estimuladas por la idea de la democracia directa de vocación socialista.

Fue esta confrontación un encuentro que se escenificó políticamente básicamente en Europa durante el siglo XIX, sin manifestaciones en el plano internacional. Sólo en el plano interno, especialmente en Francia, epicentro de la revolución humanista, se materializó el enfrentamiento con la insurrección de las comunas de París (1848). Allí, mediante una coalición de clérigos, aristócratas, campesinos y burgueses, se reprimió el movimiento popular de naturaleza socialista, consolidando la idea de la democracia representativa. Se podría decir que el fracaso de este levantamiento fue la primera derrota significativa de las fuerzas de cambio que impulsaban la igualdad como condición necesaria y suficiente para el logro de la libertad del hombre. Pero no sólo fue Francia, en el “viejo continente”, el escenario de esa confrontación. Ella se reprodujo aquí, en Venezuela, con su manifestación más violenta expresada en la mencionada Guerra Federal (1859-63). Y si allá, en Francia, el primer choque resultó en un descalabro que apuntaló la sociedad de clases jerarquizadas, aquí concluyo en un armisticio (el Tratado de Coche) que instaló un régimen de centro, que sin eliminar las desigualdades, desarrolló una cultura política focalizada en el igualitarismo. Un pensamiento mediante el cual los ciudadanos se consideran iguales entre si, aun cuando en la práctica las diferencias entre los variados sectores sociales sean aun más pronunciadas que las existentes en las sociedades liberales. Fuimos los venezolanos los primeros que pudimos validar el hecho de que las posiciones de centro son en el fondo conservadoras. El pensamiento igualitario se convirtió en la base de la ilusión de armonía social que imperó en nuestro país durante casi la totalidad del siglo XX, consagrando el dominio del liberalismo, con su sociedad de clases estratificadas, que condujeron en el último cuarto de siglo a la exclusión social y económica de amplios sectores populares. De modo que en el ámbito controlado por la cultura política del humanismo, se instauró el liberalismo, cuyos resultados son la negación de las ideas sostenidas por el Iluminismo. No obstante en Europa, sin armisticios sintetizadores, continuó el debate en el terreno político, el cual permitió un crecimiento de las fuerzas socialistas (comunistas), particularmente en Francia e Italia.

Mientras esto sucedía en el plano doméstico de los pueblos, en la arena internacional la dialéctica se mantenía entre las democracias republicanas y las hierocracias monárquicas, dentro del marco de un nuevo ingrediente ideológico: el nacionalismo. Un pensamiento centrado en la idea de la nación que comenzó a formarse a partir de la de pueblo, que dominó en la filosofía política del siglo XVIII, cuando se acentuó con ella la importancia de los factores naturales y tradicionales (conservadores por su propia naturaleza) en perjuicio de los voluntarios. Se trata de una idea, cercanamente asociada con la noción de racismo, antagónica al humanismo, impulsora de la vieja idea del Imperio Universal, con su modelo romano rescatado por el intelectual italiano Dante Alighieri durante el período del Renacimiento Europeo. Ello replanteó la contradicción, formulando una nueva entre el humanismo, con su vocación cosmopolita (el hombre ciudadano del mundo), y el nacionalismo con su inclinación conservadora. Dentro de esta novel dialéctica se ha desarrollado hasta hoy la política internacional, teniendo como fondo una nueva y cuestionada disciplina académica: la geopolítica. Una teoría, con aspiraciones científicas, que coloca las variables geográficas como imperativos en el proceso de ordenación de la humanidad. Se minimizaba así el planteamiento del Iluminismo, expresado por el alemán Enmanuel Kant, quien visualizaba el orden internacional, como el resultado de acuerdos políticos entre los pueblos, logrados en un foro internacional. Una idea que dio lugar a la del multilateralismo que obtuvo su máxima realización con la hoy degradada Organización de las Naciones Unidas (ONU). Fue una postura asumida en América por nuestro Libertador, Simón Bolívar, quien la formuló como base para la convocatoria del celebre Congreso Anfictiónico de Panamá, saboteado por los EEUU. País donde ya emergía con fuerza la idea del imperialismo, con sus bases nacionalistas, y su sustrato racista. La estrategia bolivariana tenía por objetivo la búsqueda del balance de poder internacional, mediante la multipolaridad (la coexistencia de varios poderes equipotentes en el sistema internacional), como paso previo para el logro del ideal de la multilateralidad.

Este nuevo cuadro dialéctico produjo la desviación del esfuerzo científico, de profundas bases humanísticas, hacia una postura complementaria al nacionalismo con su inclinación imperialista: el militarismo. La idea de asociar la seguridad del Estado, fundamentada en la impermeabilidad de sus límites (un hecho irrealizable en la práctica, como lo sostienen por igual liberales y socialistas), con la fortaleza de sus capacidades militares. De modo que a la masificación de las unidades de combate, derivadas de la idea de la defensa popular, surgida en Francia, y adoptada en nuestro país desde 1810, para defender la revolución de los ataques de las hierocracias, se le añadía la tecnificación de las armas, dando lugar a lo que se ha conocido como carrera armamentista. Una conducta que desvió el uso del conocimiento para solucionar el problema económico humano de la escasez, hacia la alimentación de una industria de guerra. Se creo así un proceso cuyo desarrollo exigía grandes concentraciones de capital, el cual contribuyó a acentuar las desigualdades internas de las sociedades y externas, entre los pueblos que conformaban lo que ya constituía un sistema internacional de alcance global. Ha sido una etapa histórica, caracterizada por el uso de la guerra como instrumento de la política internacional, que condujo a la planetización de este fenómeno a través de un proceso de escaladas, ya previsto por el polemologo alemán Karl von Clausewitz.

Esa carrera armamentista tuvo como consecuencia inmediata la creación de armas cada vez más letales y una indefinición entre los espacios donde se desarrollaba la acción bélica (Teatros de Operaciones), y aquellos donde devenía la vida ordinaria de los pueblos, identificados como Zonas del Interior. Estos últimos pasaron a ser objetos directos de las acciones destructivas de las fuerzas militares en pugna, especialmente a partir del adelanto del poder aéreo. Las fuentes de energía; los sistemas viales, incluyendo puertos y aeropuertos; los centros industriales; las redes de comunicaciones; las instalaciones de gobierno; en fin todo aquello que tenía incidencia en el fortalecimiento de las fuerzas militares confrontadas, se convirtieron en blancos estratégicos para los beligerantes. Apareció de esta manera el concepto de “daños colaterales”, como un eufemismo para designar los perjuicios causados a la vida de los ciudadanos y a sus propiedades. Se trata de una ironía, pues aparte de debilitar las unidades de combate en los teatros de operaciones, estos ataques se dirigían a causar terror directamente en la población civil, para paralizar la vida política de la sociedad (destruir el orden social del adversario). Emergía así el terrorismo, esta vez el definido como terrorismo bélico, considerado como un estrago innecesario para la obtención de la victoria militar, o para rechazar al enemigo por parte del defensor. Unas acciones caracterizadas por ampliar el número de víctimas, por afectar de modo primordial a los no combatientes, por destruir cosas y bienes sin trascendencia bélica y de bienestar humano, o de alto valor científico, cultural o histórico. Los bombardeos sobre Londres, realizados por los alemanes, los ejecutados sobre Dresden por los “Aliados” y, los realizados con armas atómicas sobre Hiroshima y Nagasaki perpetrados por los EEUU, todos durante la II Guerra Mundial, tipifican este tipo de terrorismo. Una conducta que se complementó con la introducción de la llamada guerra psicológica, potenciada por el desarrollo de los medios radioeléctricos de comunicación En este contexto, estos blancos ubicados en los espacios conocidos como zonas del interior, se transformaron en objetivos de mayor significación, que los tácticos presentes en los teatros de operaciones. La quiebra moral de la sociedad adversaria, pasó a ser más importante que la destrucción o neutralización de sus fuerzas militares mediante la acción táctica. Toda esta escalada condujo a la aparición de las armas atómicas y nucleares que hicieron factible la posibilidad de la guerra total. Una posibilidad considerada por los teóricos como irrealizable, mediante la cual se puede aniquilar totalmente la nación o conjunto de naciones coaligadas, consideradas como enemigo. Más aun, una posibilidad que hace factible la desaparición de la vida en el planeta. Razón que ha llevado a pensadores estratégicos, como el General francés Andre Beaufre, a considerar tales armas como la vacuna contra la guerra, dada la irracionalidad de su empleo.

Sin embargo, el sistema internacional no se inmunizó contra el acto bélico como resultado de la aparición de estos instrumentos irracionales en el marco de las polémicas políticas. La Guerra Fría, centrada en la disuasión mutua entre los adversarios, basada en la amenaza de la destrucción recíproca asegurada, sustituyó las confrontaciones directas entre los poderes dominantes en el sistema internacional, reemplazando los combates reales entre sus fuerzas armadas, por acciones indirectas contra los países periféricos bajo dominio o influencia de los beligerantes, mediante el esquema neocolonial. Esta modalidad de la guerra se materializó, luego de concluida la II GM, a través del enfrentamiento entre la URSS y los EEUU. En términos teóricos, aparecía el fenómeno bélico como una confrontación entre la visión humanista del socialismo y la conservadora del liberalismo. Pero en la práctica fue un enfrentamiento entre dos estados como ambiciones imperiales. Positivamente, en el Imperio ruso se había producido una revolución política (1917) que condujo al desplazamiento de la hierocracia imperante (el zarismo) y la consecuente instalación de un régimen socialista. Empero, tanto la cultura política interna imperante, fuertemente impregnada del nacionalismo, como las condiciones del sistema internacional, donde esta corriente, con su base geopolítica, dominaba las relaciones internacionales, acompañada del imperio del liberalismo, desviaron la orientación del proceso revolucionario. La vocación cosmopolita del materialismo histórico, enunciada en el Manifiesto Comunista (1872), se trastocó en un etnocentrismo con vocación de dominio universal. El mecanismo para adelantar la acción revolucionaria a escala global, la Internacional Comunista (COMITERN), se transformó violentamente, con el ascenso de Joseph Stalin al control del poder en Rusia, en un órgano al servicio de una nueva oligarquía conformada por los cuadros dirigentes del Partido Comunista de URSS, que dominaba las variadas nacionalidades sometidas al Imperio zarista. De la idea de la democracia directa practicada por los soviets (comunas), el único espacio donde ella es viable, que implicaba el control de la sociedad por la mayoría (el populismo), se pasó a una sociedad militarizada, con una visión en esencia nacionalista, cuyas relaciones internacionales tenían un fuerte contenido geopolítico. Ello explica como sus potenciales estados aliados pasaron a ser súbditos, en un esquema neocolonial

En ese marco, la estrategia indirecta, aplicada por estas superpotencias en colisión, fue la concepción que orientó su interacción en el escenario global. De otro modo, con la sola estrategia de disuasión, se hubiese paralizado la dinámica del sistema internacional, generada por la relación dialéctica entre los principales actores políticos. Así, se generalizó el uso de los conflictos existentes entre los estados de las regiones periféricas, y dentro de ellos, como medio, junto con la carrera armamentista, para desgastarse mutuamente, probando la capacidad de resistencia de los contendores en un planeta polarizado. Ello originó un tipo de conducta caracterizada generalmente por la intervención directa de uno de los contendores en las confrontaciones regionales y locales, y la indirecta del contrario. Y, cuando ello no sucedía así, por el uso de agentes –estados o sectores sociales dentro de estos- apoyados política y económicamente por los beligerantes dentro del esquema de la guerra fría. Se buscaba, con esta praxis, debilitar las corrientes económicas que alimentaban sus economías, o lograr al cerco de su adversario dentro de las llamadas estrategias de contención. De esta forma se generaban unas acciones reciprocas dirigidas al deterioro mutuo, que complementadas con la guerra psicológica, tenían como fin el desgaste de la voluntad de lucha del adversario. Ocurrió así una desescalada de la guerra, con el desarrollo de los conflictos de mediana intensidad, desplegados con métodos convencionales en regiones geoestratégicas, como el Medio Oriente o el Asia Central, y la aparición de los conflictos de baja intensidad, como los materializados en Centro América, con un amplio uso de fuerzas irregulares, con medios y tácticas elementales que recuerdan las acciones predatorias de las comunidades primitivas. Fue una forma de pensar la acción que se denominó, especialmente en la doctrina de guerra norteamericana, como estrategia del balance de poder en ultramar. Surgía así, como dominante, la llamada Guerra de Intervención, de carácter totalmente asimétrico, en las cuales el terrorismo bélico se convirtió en su signo característico. Las guerras árabe-israelíes; la guerra de Vietnam; las guerras en Afganistán; la guerra civil colombiana; la guerra del Golfo Pérsico; y la Guerra de los Balcanes, entre otras, tipificaron esta renovada pauta de confrontación bélica.

En estas nuevas circunstancias, las partes apoyadas por las superpotencias, con ventajas tecnológicas, superaban en las relaciones de poder las fuerzas adversarias. Se establecía así la asimetría como regla en la praxis militar. Una desigualdad que se incrementaba por la acción psicológica combinada del terrorismo bélico y la propaganda. No obstante, las prácticas derivadas de esa concepción no intimidaban la voluntad de las poblaciones cuyos miembros aspiraban la libertad, o simplemente el derecho de vivir dentro de los usos; las creencias: y, las costumbres de las culturas que les daban identidad. Los primeros, generalmente motivados por las concepciones humanistas del socialismo. Los últimos, por el nacionalismo o los fundamentalismos religiosos. Emergían así las acciones de resistencia casi espontáneas, las cuales frente a la superioridad tecnológica del adversario, recurrían a acciones predatorias irregulares, y ante el terrorismo bélico, desarrollaron el contestatario. En la realidad ninguna de estas modalidades bélicas eran originales. De alguna manera, ellas se habían practicado en el pasado. Y, las acciones de resistencia, con el terrorismo contestatario asociado, no son una excepción. Para no ir muy lejos en la historia, hay que recordar la resistencia española a la invasión napoleónica, un hecho coincidente en el tiempo con la resistencia materializada en nuestro país ante la invasión española capitaneada por Pablo Morillo, destinada a recuperar el dominio colonial del territorio venezolano, después de la revolución emancipadora de 1810. En ambos casos, ante el terrorismo bélico ejercido por las fuerzas ocupantes, surgió el terrorismo contestatario, el cual, en lo que respecta a la resistencia venezolana, se plasmó en el Decreto a Guerra Muerte contra los españoles y canarios (1813) que no acompañasen las aspiraciones de independencia y libertad del pueblo venezolano.

Ha sido en este marco donde apareció lo que algunos autores han llamado la Guerra de las Pulgas. Una descripción metafórica de un tipo de confrontación bélica en la cual, la parte débil de la ecuación asimétrica, mediante la organización popular, estructura cientos o miles de pequeñas unidades autónomas, que con acciones militares locales (emboscadas, pequeños ataques sorpresivos, sabotajes, etc.) e, incluso, actos terroristas, conjuntamente con obligar a dispersar las fuerzas adversarias, para batirlas por separado con medios convencionales, donde se obtengan relaciones de fuerza favorables, le afectan su voluntad de lucha, por los efectos psíquicos de las acciones violentas sorpresivas. Un modo de desgastar sus capacidades físicas y morales para quebrarle su espíritu combativo. La acción desarrollada por los Viet Cong, magistralmente conducida por el general Nguyen Giap, cuyos textos son hoy en día un material de referencia fundamental en lo concerniente a las tácticas para el desarrollo de este tipo de confrontación, es el ejemplo clásico en la actualidad de este tipo de conducta bélica. Un comportamiento adoptado por las grandes potencias, en el marco de sus Guerras de Conveniencia –destinadas exclusivamente a establecer explotaciones económicas, abrir mercados y perjudicar, aniquilar o destruir, directa o indirectamente, potencias rivales- o sus Guerras de Intervención con fines geoestratégicos, quienes han venido sustituyendo sus grandes formaciones castrenses por pequeñas unidades, las llamadas fuerzas especiales, que activan “quintas columnas”, como en el caso de los paramilitares colombianos, para actuar contra sus adversarios.

Es dentro de esta praxis en donde se inscribe la defensa estratégica de Venezuela, dentro de una política cuyo fin es la estabilización de la nación. Una razón que se fundamenta en la minimización, a través de las prácticas de la tolerancia y la solidaridad propias del humanismo, en la aplicación del socialismo como teoría científica orientada hacia el establecimiento de un orden persistente. Un modelo de relaciones entre los sectores sociales diferenciados, en el cual las acciones cooperativas entre las partes, predominen sobre las conflictivas. Se intenta maximizar la seguridad ciudadana (la garantía de la vida y el respeto a las propiedades de los venezolanos y extranjeros que conviven el país), minimizando la violencia social y la política que colocan bajo riesgo la unidad de la nación y la integridad del territorio. Obviamente ello es un desafío a la estructura jerarquizada del sistema internacional y de la propia comunidad nacional, por lo que es explicable el conflicto con los poderes dominantes globalmente, asociados con la elite conservadora de nuestra sociedad. Pero el fondo de nuestra política es la implantación de la idea de zona de paz –que queremos compartir con los pueblos hermanos sudamericanos- en el país. Es decir un espacio que se libere del uso de la fuerza militar por parte de las grandes potencias con propósitos políticos en el sistema internacional. Es el abandono de la pasividad implícita en la noción de neutralidad, por el activismo que combate el militarismo del imperialismo, oponiéndose a las carreras armamentistas con el desarrollo del derecho a la defensa que busca garantizar la paz, buscando el equilibrio internacional e interno. Es la forma como el socialismo concibe la defensa nacional.


http://www.aporrea.org/ideologia/a25605.html

Archivo del blog

¿Como debe ser la Fuerza Armada de la Primera Potencia Energetica Mundial?

¿Como debe ser la Fuerza Armada de la Primera Potencia Energetica Mundial?